¿Tus colaboradores siguen en Home Office? Dinámicas de integración online

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La contingencia sanitaria ocasionada por el coronavirus SARS-CoV2, causante del COVID-19 ha traído consigo una serie de cambios en nuestra vida diaria, especialmente en la forma de estudiar y trabajar. Ante el riesgo de contagio, miles de trabajadores han comenzado con el esquema de Home Office, que si bien tiene muchas ventajas, provoca el distanciamiento con los compañeros de equipo y, con ello, una pérdida de la integración grupal.

Señales de poca motivación y desintegración en los equipos de trabajo

La poca motivación no siempre es fácil de detectar, ya que los colaboradores no suelen manifestarla de forma evidente, incluso ellos no siempre están conscientes de que han perdido ese “algo” que los motiva a dar lo mejor de sí mismos, pero como dice el refrán “lo que no se dice, se actúa”. Las señales más frecuentes son:

• Colaboradores que prefieren trabajar aislados. Muchas veces trabajamos bajo la idea: “si quieres algo bien hecho, hazlo tú mismo”, sin embargo para alcanzar las metas de la compañía es necesario trabajar en colaboración con el equipo, o entre equipos. Por ejemplo, podemos aprovechar las opiniones de los compañeros para salir más rápidamente de un problema con un cliente, o bien, dar nuestra opinión en una junta especialmente al trabajar de forma remota. Así que si percibes que tus colaboradores no participan en los chats de trabajo, pon atención porque podrían estar manifestando falta de motivación.
• Faltas frecuentes. Al trabajar en Home Office no siempre es fácil notar cuando un colaborador falta, a menos que cuenten con herramientas virtuales de control de horarios; sin embargo, puedes notar retrasos en tiempos de entrega, que los colaboradores no contestan los mensajes en los chats oficiales o grupales, que participan poco, o que comienzan a poner excusas para no participar en reuniones. Los colaboradores que constantemente toman minutos adicionales a su hora de comida, llegan tarde o se van temprano son focos de alerta para verificar qué está sucediendo en el entorno general.
• Baja productividad. Aunado a lo anterior, un colaborador poco motivado probablemente baje su nivel de productividad, compromiso con la compañía, e incluso puede percibirse una disminución en la calidad del trabajo, lo que a la larga puede traer consecuencias graves para la compañía, especialmente si son varios los miembros del personal quienes actúan de esta forma.
• Cambios radicales en el comportamiento. El cambio en la forma de relacionarse con los compañeros de trabajo, que puede ir de una relación amigable a un mutismo, ignorarse, tener rencillas o malos entendidos puede provocar falta de confianza y compromiso tanto con la organización, como con los compañeros de trabajo; esto puede reflejarse en falta de interés, poca o nula participación en proyectos, baja en rendimiento, ausentismo, entre otras conductas.
• Cansancio o falta de reconocimiento. En muchas ocasiones, los colaboradores dan lo mejor de sí mismos al ejercer su trabajo, pero se sienten abrumados al desempeñarse en un ambiente donde no se les brinda el reconocimiento. Es importante reconocer si el clima laboral es adecuado o si hay un ambiente tenso, donde los colaboradores no se hablan o tienen rencillas con frecuencia para tomar cartas en el asunto e intervenir antes de que la problemática se intensifique.

Si tus colaboradores se encuentran en Home Office y muestran señales de falta de motivación, poca comunicación y desintegración, tenemos una buena noticia: hay dinámicas de integración laboral grupales online que te pueden ayudar a energetizar a tu equipo. A continuación te contamos algunas que puedes utilizar para lograr un entorno de trabajo más participativo.

8 Dinámicas de integración en línea

Antes de empezar, invita a tu personal a unirse a una reunión a través de las plataformas online con salas en directo, en las que pueden prender su cámara y audio para reducir esa distancia física y motivarles a participar directamente en las dinámicas de integración laboral; de lo contrario, pueden sentirse excluidos o perder el interés al no integrarse a las actividades.

1. Identificación con animales. Ideal para dar la bienvenida a nuevos integrantes del equipo, se pide a los asistentes que se presenten con su nombre y un animal con cuyas características se identifiquen. Para hacerlo más ameno, el participante puede mencionar algunas características del animal y que sus compañeros adivinen de cuál se trata.
2. Vendiéndose a sí mismo. Esta dinámica puede hacerse individual o en equipos, elaborando un anuncio para venderse a sí mismos destacando sus cualidades, y tras una presentación, los demás elegirán al “producto” que comprarían y explicarán por qué lo harían.
3. Vender cosas absurdas. Una dinámica similar a la anterior, en la que se desarrollan las habilidades orales para vender un producto tan absurdo como un peine para calvos, lo que además despierta la argumentación y negociación, puesto que se elegirá un cliente potencial entre los participantes.
4. Máquina del tiempo. Los participantes eligen un acontecimiento de la historia que les gustaría haber vivido y lo exponen a los demás, con el fin de romper el hielo, fomentar el conocimiento de los miembros del equipo y eliminar las tensiones.
5. Premios virtuales. Los líderes y jefes de las empresas pueden reunir a sus colaboradores para darles un reconocimiento virtual, ya sea verbal, con una tarjeta o certificado de regalo, un bono o días de descanso, como una forma de reconocer el esfuerzo del personal.
6. Presentación sin dientes. Esta divertida actividad puede realizarse para presentar a nuevos miembros del equipo, o como parte de un juego para romper el hielo. Los participantes se presentarán, dirán sus hobbies o tratarán de vender un producto, pero ojo: tendrán que esconder los dientes al hablar, ocultándolos con los labios. Además de romper el hielo, esta dinámica hará reír a todos y les permitirá despertar su ingenio y creatividad.
7. Díganlo con mímica. El clásico juego de mímica es ideal para las dinámicas online, puede hacerse por equipos y, a diferencia de los juegos presenciales, el participante debe apagar su micrófono y actuar para que su equipo adivine el nombre de una película o libro.
8. Conversación muda. Similar al juego anterior: en este, dos participantes tendrán que apagar sus audífonos, pero su micrófono seguirá encendido, por lo que no tendrá que escuchar nada de la videollamada, y ambos tendrán que mantener una conversación sobre un tema en común: cómo preparar un almuerzo, a dónde ir de vacaciones, organizar una fiesta sorpresa, entre otros. Los resultados de la conversación serán muy divertidos.

Estas son solo algunas dinámicas de integración laboral en línea para relajar el entorno de trabajo, permitir que los colaboradores se conozcan, rompan el hielo y solucionen conflictos que se presentan en su día a día.

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